En la costa cantábrica gallega se puede disfrutar de la Ría de Ribadeo con su perfil rectilíneo y la formación de sus terrazas fluviales, en una de las cuales se sitúa la villa de Ribadeo y sus calles limitadas por sus casas señoriales.
Entre las villas de Ribadeo y Burela, la costa se encuentra "tallada" por la diferencia de resistencia de las rocas que la forma, la dinámica marina hace retroceder los acantilados rompiéndolos en originales islotes dejandonos a la vista las formaciones de pizarra que forman pequeñas vaguadas, cuevas y corredores, como la playa de las Catedrales cuya belleza sólo se puede disfrutar en la bajamar. Como si de unas ruinas de una vieja catedral se tratase, podemos encontrar los restos de los contrafuertes que arriostran la costa al más puro estilo gótico. Son los pequeños abrazos con los que se entremezclan la tierra y el mar.
Más al oeste, la Ría de Foz deja paso a las sierras costeras como la de O Xistral que diferencia, hacia el norte, las fuertes pendientes del los ríos cantábricos con un gran poder erosivo, de los ríos del sur de curso más lento y sosegado. Estas sierras son de gran variedad de roquedo lo que en algunos casos dan lugar a amontonamientos que parecen castillos y otras veces a bandas calcáreas, como en el caso de las "Covas do rei Cintolo", ya en la ciudad de Mondoñedo.
La ría de Viveiro posee dos orillas muy diferenciadas, mientras que la orilla oeste está compuesta de esquistos lo que permite unos acantilados muy abruptos la orilla este que está formada por granitos y presenta algunas "llanuras" debido a la erosión.
Entre las villas de Ribadeo y Burela, la costa se encuentra "tallada" por la diferencia de resistencia de las rocas que la forma, la dinámica marina hace retroceder los acantilados rompiéndolos en originales islotes dejandonos a la vista las formaciones de pizarra que forman pequeñas vaguadas, cuevas y corredores, como la playa de las Catedrales cuya belleza sólo se puede disfrutar en la bajamar. Como si de unas ruinas de una vieja catedral se tratase, podemos encontrar los restos de los contrafuertes que arriostran la costa al más puro estilo gótico. Son los pequeños abrazos con los que se entremezclan la tierra y el mar.
Más al oeste, la Ría de Foz deja paso a las sierras costeras como la de O Xistral que diferencia, hacia el norte, las fuertes pendientes del los ríos cantábricos con un gran poder erosivo, de los ríos del sur de curso más lento y sosegado. Estas sierras son de gran variedad de roquedo lo que en algunos casos dan lugar a amontonamientos que parecen castillos y otras veces a bandas calcáreas, como en el caso de las "Covas do rei Cintolo", ya en la ciudad de Mondoñedo.
La ría de Viveiro posee dos orillas muy diferenciadas, mientras que la orilla oeste está compuesta de esquistos lo que permite unos acantilados muy abruptos la orilla este que está formada por granitos y presenta algunas "llanuras" debido a la erosión.
En aquella ocasión, no todos pudimos completar el viaje y los que llegamos a la cita, no pudimos disfrutar de las maravillas que escondía la Playa de las Catedrales. Se nos había olvidado consultar el horario de las mareas y llegamos a la pleamar. ¡Qué desastres! Dos años más tarde y con la lección ya aprendida, consulté antes de la salida el horario de las mareas. .
Toda mi ilusión puesta en este viaje: una compañía agradable, unos pocos días primaverales para disfrutar y una Galicia para observar de una manera diferente. Tras el madrugón inicial, emprendimos la salida en dirección a las tierras lucenses. Un buen desayuno antes de iniciar el camino, un sol radiante acompañándonos y muchas risas después, llegamos a la playa de las catedrales con la marea alta (aún estaba bajando). La mala suerte nos perseguía, pero finalmente pudimos disfrutar de esta maravilla de la naturaleza. .
6 comentarios:
Yo creo que es una de las playas más espectaculares del planeta...
¡Imprescindible la visita!...
Un saludo...
gracias por la visita delokos!!!
a mi me ha encantado la visita y deseando repetirla con una empanada y una tortilla.
un besito
lástima que la vez que fui, de las catedrales sólo se vehían las cúpulas, paisaje chulísimo pero incompleto. a ver si repetimos la visita. la empanada ya la llevo yo. besos
ya sabes que cuando quieras, qué tal a mediados de mayo? escapada a la playa de las catedrales y visita a san andrés de teixido. te apuntas???
bicos jelenita
La tengo en mi lista de "tengo que visitar.." junto a la de Rodas, esperemos que no pase de este veranito...!
Un besazo y mil gracias por las instantaneas con tanta definición! (ojo a la última en la que sales con pose pija pija eh? xD)
antes muerta que sencilla, jajaja!!! Siendo de la tierra te recomiendo la visita en temporada baja porque en cuanto baja la marea las escaleras de la playa parece la entrada del Corte Inglés en rebajas.
En breve os pondré alguna de las fotos de los Cañones del Sil.
1 beso
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