Estamos disfrutando ya de una maravillosa primavera de sol, a pesar de las lluvias que a abril le adjudica el refranero popular. Los árboles ya germinan, algunos de ellos ya nos regalan sus flores. El mar aún conserva parte de esa bravura del invierno pero que se va tornando calma. Los días se hacen más largos y nuestros cuerpos empiezan a salir del letargo en el que entran cada invierno.
Este es el mes del libro, la joya preciada con la capacidad de curar los males del espíritu y la llave que nos ha de abrir las puertas de la tolerancia y la libertad. El 2 de abril recordando el nacimiento de Andersen se celebra el día del libro infantil y juvenil y el día 23 recordamos a Cervantes, Shakespeare, Molière e Inca Gracilazo que nacieron este mismo día en diferentes años, celebrando el día del libro y la lectura.
Dicen los expertos que cada vez se lee menos, yo también lo creo. Porque son pocas las personas que pueden hacer gala de saber lo que significan las palabras arriba en negrita y muchos los libros que podría recomendar leer para que aprendan por lo menos un par de conceptos. A pesar de que, personalmente, creo que no es tanto un problema de lectura como de educación. Sólo animar a esas personas a que revisen el significado de las mismas en la página oficial de la Real Academia Española.
Hasta ahora creía que vivía en una nación en donde uno podía hacer uso de su libertad de expresión y en la que podía actuar conforme a mi moral y mi ética, siempre y cuando respetase a los individuos con los que convivo en sociedad. Pero, paradojas del destino, hacen que las personas que presumen de ser de izquierdas y de defender los derechos de la Humanidad son las menos tolerantes con sus semejantes. Ya no se puede expresar una opinión en voz alta, ni actuar en coherencia a lo que te dicta la razón, sino para contentar a unos individuos con una mala leche acumulada y una rabia contenida que sólo generan odio y violencia a su alrededor. No puedo sentir más que vergüenza hacia algunos seres humanos.
Al hilo de estas palabras, recuerdo un vídeo visto en el blog Océano de Luz de Sánchez Dragó en una entrevista realizada para la televisión española. Y me quiero sumar a las palabras de ambos cuando dicen: "Lamento profundamente haber nacido español, lamento haber nacido en un país donde la envidia es pecado capital, lamento haber nacido en un país donde cada 30 o 40 años, a lo largo de muchos siglos, ha habido una guerra civil y donde los hermanos se han masacrado entre ellos, no por grandes causas, sino por una herencia, por una cuestión de cuernos, por una mujer, por una pasión. Lamento haber nacido en un país tan mal educado como lo está España (...)"
Sólo me queda recomendar la lectura de un libro que me parece un ejemplo de Tolerancia, para la búsqueda de las Libertades dentro del País Vasco: “Voces sobre Euskadi” de Antoni Batista. Libro que analiza desde el bombardeo de Guernika hasta la situación actual de Euskadi, desde el punto de vista de políticos, víctimas del bombardeo y de los atentados, familias de terroristas… Ojalá fuésemos capaces de aprender algo de aquellas personas que, con ideales muy diferentes, fueron capaces de elaborar una constitución para este país. Aunque mi cabreo de hoy venga por otros temas más sociales.
23 de abril de 2007
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4 comentarios:
Ya sabes que tenemos puntos de vista parecidos, así que poco tengo que añadir a lo dicho. Suelo ver a Dragó por las noches, la verdad es que es todo un personaje. En esta entrevista con el loco de la colina tiene más razón que un santo.
Ya dije en aquel post que me avergonzaba de ser español y lo sigo manteniendo. Que esto no lo entienda un nacionalista vasco o catalán como algo a su favor, que me parecen igual de patéticos todos los nacionalismos militantes. El ser español implica una forma de ver la vida, de ser y de sentir. Y en eso los españoles de todos los rincones son esencialmente iguales, aunque en la forma haya divergencias. Es el sello ibérico.
Enhorabuena por tu entrada.
Estoy de acuerdo con lo de que somos un pais con una reducida educación.. vaya si estoy de acuerdo.
Avergonzarme de ser de aqui o de alli, o al contrario estar orgulloso.. me parece un discurso más viejo que los tiempos para obtener beneficio de los que se lo creen.
Está claro que es un estereotipo más..
desde el exilio solo tengo que reivindicar que estoy orgullosa de haber nacido gallega y espanhola: de la educacion que me han dado, del sentido de la vida, de la amistad y de la dignidad; de una formacion de izquierdas y social...
sanchez drago me hace cierta gracia pero nunca me ha servido como ejemplo de nada (ademas pude ver esa entrevista cuando la echaron en su momento y al final lo unico que buscaba era promocionar su libro haciendo cierta demagogia con frases faciles)
lo importante son otras cosas, no las olvidemos
Esta vez no voy a agregar nada a vuestros comentarios porque ya he dicho bastante con la entrada. Sólo agradeceros a los tres vuestros puntos de vista que siempre aportan visiones nuevas!!!
Un besito Sincronie, Hogarth y Bea
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